La hepatitis es una enfermedad grave tanto en las personas como en los perros. La hepatitis en perros es producida por un virus, la infección generalmente afecta a cachorros menos de 1 año o perros no vacunados. Los perros se contagian por contacto directo con otros perros enfermos pero también por sus secreciones y su orina. Algunos de los síntomas son fiebre, falta de apetito, amigdalitis, laringitis o faringitis, catarro, conjuntivitis, mayor secreción nasal y en los ojos, vomito, diarrea, edema o hinchazón abdominal y dolor, además de nervios, depresión, convulsiones.